Me aplasta la hermosura
de los cuerpos perfectos,
las sirenas que ululan en las noches de fiesta,
los códigos de barras,
el baile de etiquetas.
Me arruinan las prisas y las faltas de estilo,
el paso obligatorio, las tardes de domingo
y hasta la línea recta.
Me enervan los que no tienen dudas
y aquellos que se aferran
a sus ideales sobre los de cualquiera.
Me cansa tanto tráfico
y tanto sinsentido,
parado frente al mar mientras el mundo gira.
Seguidores
lunes, 7 de marzo de 2011
A lo largo de los cruces de tu camino te encontrarás con otras vidas: conocerlas o no conocerlas, vivirlas a fondo o dejarlas correr, es asunto que solo depende de la elección que efectúas en un instante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario